Cuando el Sol se ha exiliado

Esta mañana, mientras esperaba a que la compu se iniciara, estaba reflexionando sobre el Sol en Acuario. Son esas reflexiones que no sabes de dónde vienen, pero que cuando vienen tienes que darles audiencia porque si no, las tienes todo el día intentando acaparar tu atención y neuronas.

El Sol en Acuario siempre me ha llamado la atención, no sólo porque es mi signo solar y por tanto en mi carta es donde está, sino porque siempre me he preguntado qué hace una luminaria tan importante, el rey del sistema solar, el dador de vida, en el signo donde menos dignidad tiene.

Desde el principio de mis largos estudios astrológicos, largos no por tediosos, sino por la gran cantidad de información y tiempo que requiere la práctica de la Astrología, mi profesor nos decía en clase que un signo siempre se manifiesta con las características propias, pero que además da expresión a las características negativas del signo opuesto a su posición. Por ejemplo, el signo de Tauro se caracteriza positivamente por ser un trabajador incansable, generoso y gran anfitrión; pero al mismo tiempo adquiere las características negativas de su opuesto, Escorpio, a saber: celoso, posesivo, manipulador emocional, vengativo…

¿Qué ocurrirá entonces cuando un planeta se encuentra en el signo opuesto al suyo sin ninguna dignidad, como sucede con el Sol en Acuario?. Es más, el estudio de la Astrología y su práctica te hacen comprender que en la Creación nada, absolutamente nada, sucede por azar, todo tiene una razón y viniendo de D os siempre es buena. Entonces, ¿qué nos está diciendo Él a los que nos ha hecho nacer con el Sol en exilio, es decir, en Acuario?

La explicación nos viene dada por una regla básica del Universo: el Universo siempre busca el equilibrio. Según la tabla de dignidades de los planetas, el Sol en Acuario obtiene una puntuación de -5 puntos. Por tanto vemos que una carta con el Sol en esta posición, no sólo carece absolutamente de la energía solar en su ser, sino que hay falta de ella, tiene que equilibrar esos 5 puntos negativos hasta alcanzar la neutralidad que exige la regla de la Energía universal, buscar el equilibrio.

Este equilibrio podemos adquirirlo de dos maneras: la manera terrenal y continuar con las ataduras del mundo material o la manera espiritual y liberarnos de dichas ataduras. Generalmente, cuando estamos muy metidos en estas lides terrenales y no sabemos aún de las posibilidades espirituales y evolutivas, decidimos de manera inconsciente y casi automática, buscar ese equilibrio del modo terrenal.

¿Qué ocurre cuando el Sol en Acuario busca el equilibrio a través de las características de su signo, Leo?. Como hemos visto anteriormente, un signo manifiesta las características negativas de su opuesto. Por lo tanto, si decidimos equilibrar esa energía solar a través de la manifestación de las características de Leo, sólo vamos a poder expresar la parte negativa de dicho signo. Esto se traducirá en orgullo, egoísmo, prepotencia, autoritarismo, exigir pleitesía y servidumbre a los demás, y un laaaargo etcétera de características bastante repudiables.

Por tanto, esta decisión no sólo nos hará ser odiados y rechazados por los demás, aislándonos del mundo, sino que nos mantendrá atados a él a través de la expresión de nuestro Ego. No en vano, en Jyotish, la Astrología védica de la India, el Sol es considerado como uno de los planetas más maléficos, ya que en este plano material generalmente se expresa mediante acciones egoístas y centradas en el Yo terrenal, lo que evita que evolucionemos y salgamos de la rueda de encarnaciones, que es el principal objetivo de nacer y vivir.

Pero cuando comenzamos a sentir la llamada espiritual y la necesidad de evolucionar, cuando nos metemos de lleno en la búsqueda de nuestro Ser Inmutable, nuestra chispa divina, tenemos la obligación personal y hacia D os de buscar el equilibrio de la manera espiritual, adquiriendo y expresando las características del signo de Acuario, por las cuales el Creador nos hizo nacer con el Sol en dicha posición.

¿Por qué D os nos hizo nacer con este Sol?. Como la expresión terrenal del Sol es el ego, al colocarnos Él en este plano con el Sol tan debilitado, nos está pidiendo u obligando, según aceptemos la tarea o no, a vivir apartado de las acciones que alimenten nuestro ego, facilitándonos de este modo la liberación del mundo terrenal.

Nos está facilitando la expresión positiva de las características de Acuario, a saber: Libertad, Igualdad y Fraternidad. Seguro que más de un lector relacionará estas tres palabras con la consigna que acompañó y caracterizó la Revolución Francesa. No en vano, Francia es un país nacido bajo el signo de Leo, cuna de los reyes más autoritarios y absolutistas del mundo. Era necesaria dicha revolución para que este país desechara por fin las características negativas de su signo natal, Leo. Bien, pues ‘sencillamente’ eso nos está pidiendo D os al poner nuestro Sol en dicho signo: hacer una revolución interior que de paso a una vida basada en esas tres premisas. LIBERTAD para todos, IGUALDAD entre los seres humanos y FRATERNIDAD, hermandad de la Humanidad, hijos de un mismo Padre.